Para Directora de Mediación el mejor título es ser una abuela muy feliz

 

Textos y Foto: Verónica Barrios.

Gladys Alfonso de Bareiro, directora de Mediación del Poder Judicial, contó que su rutina es llegar en el Palacio de Justicia a las 7 menos cuarto y en el día tiene que organizar para designar los mediadores que llevarán las audiencias solicitadas.

Explicó que en esas audiencias solicitadas vienen las propias partes cuando son las particulares extrajudiciales y las otras que designarán son las judiciales las que son derivadas las de los juzgados, sea Niñez, Penal, etc., porque trabajan en varios fueros.

Rememoró que la Oficina de Mediación fue creada por el Poder Judicial atendiendo a que se debe trabajar por la cultura del diálogo, no judicializar todo. Refirió que la Mediación no para durante la feria judicial, hubo en la quincena de enero más de 78 carpetas ingresadas de diferentes fueros de los cuales lo que más solicitó fue de Niñez.

Indicó que lo más llama la atención es que los papás vinieron a hacer ofrecimiento de Asistencia alimenticia. Manifestó que de los casos que se atendieron durante la quincena de este mes fueron de Asistencia alimenticia, Ofrecimiento, Régimen de Convivencia, Incumplimiento de Contrato, problemas vecinales, la falta de pago de salarios, indemnización por accidente.

Reflexionó que con el correr de los años han aumentado las audiencias de Mediación, eso significa que se está implementando aquello y la gente ya está yendo al diálogo, lo mejor que desjudicializar, el acuerdo a que llegan es voluntario.

Expresó que amo la Mediación siendo docente de una Institución entonces trabajó con los conflictos de los adolescentes, por ahí hubo un Curso en el que le invitaron que se trataba sobre la Mediación Escolar. Enfatizó que aplicó el conocimiento de Mediación en los adolescentes en que ellos se conviertan en buenos negociadores.

Detalló que cuando inició como mediadora le dio una visión y al pasar del otro lado del escritorio vio la cuestión de saber administrar la Dirección, desarrollar más la paciencia y la empatía.

Manifestó que su mejor título es ser una abuela muy feliz, tiene un solo nieto que le cambió la vida, pasa tiempo con él y juega muchísimo. No sabe la fórmula para equilibrar su rol de abuela con su trabajo, pero puede administrarlo todo.