Tribunal condena por violencia familiar abordando el daño psicológico de la víctima y con un enfoque de género

 

Textos y Foto: Verónica Barrios.

 

Mauricio Igor Díaz es condenado a una pena privativa de 4 años por violencia familiar. Así decidió el tribunal presidido por el juez Juan Pablo Mendoza e integrado por Fabián Weisensee y Cándida Fleitas.

 

La lectura de la sentencia primeramente fue secretaría, para luego tomar la palabra el presidente del tribunal. El presidente del tribunal, Juan Pablo Mendoza explicó que han verificado los elementos probatorios exhibidos en juicio, las declaraciones testificales, los informes psicológicos que dan cuenta de un daño psicológico existente, si bien se habló de recursos de afrontamiento de la víctima para salir de esa situación, no se niega la existencia del perjuicio y el daño que ha quedado.

 

Indicó que la existencia del hecho es resultado de la violencia psicológica y el tribunal comprobó a través de las pruebas.

 

En cuanto a la sanción, detalló que el tribunal ha verificado que el autor buscó castigar a la víctima por romper su promesa de ayuda, por lo que es un agravante a la sanción, también encontraron consecuencias reprochables que el hecho es de magnitud considerable, ya como consecuencia la víctima debió someterse a terapia, modificó su estilo de vida, su vida social y su vida profesional.

 

También las circunstancias personales en cuanto a la existencia de sanciones penales previas, refirió que han juzgado en contra, le han favorecido otras circunstancias como el pedido de perdón a la víctima y no ser garante de la misma en el tiempo de los hechos. Señaló que el acusado fue absuelto por coacción grave y lesión grave.