Su rol de actuario es más humano con las partes y amigo de los funcionarios judiciales

 

Textos y Foto: Verónica Barrios.

El abogado Óscar Fernández, actuario del juzgado de sentencia de la jueza Mesalina Fernández, expresó que su rol como actuario es más humano con las partes, es más compañero y amigo de los funcionarios judiciales. Resaltó que su función es saber escuchar a las partes y ser más humano para solucionar los problemas que se plantean.

Sobre la realidad de los pasan en los juzgados, contó que en la actualidad se sienten muy desprotegidos porque hay mucha persecución y más al actuario que es responsable directo de la secretaría. Mencionó entre los ministros de la Corte que  tenían más trato cercano con los funcionarios a Raúl Torres Kirmser, Miguel Bajac y Sindulfo Blanco.

Al respecto, reflexionó que actualmente ellos no tienen esa entrada con los miembros de la Corte Suprema de Justicia y es algo que realmente les preocupa.

Al referirse sobre su rutina, relató que su día inicia a las 5 AM, organiza su vida laboral y familiar, al llegar al juzgado verifica la agenda de las audiencias y trabaja en conjunto con sus compañeros funcionarios. Detalló que la labor del actuario es prácticamente de 24/7, pero gracias a la jueza Mesalina Fernández no tiene tantos inconvenientes, a la mañana es su horario laboral, a la tarde tiene su tiempo para su familia y a la noche realiza ejercicios para desestresarse.

 En cuanto a la organización del juzgado, refirió que actualmente trabajan con causas de acción penal privada y también de acción penal pública porque la jueza Mesalina está interinando el juzgado del magistrado que se jubiló Elio Ovelar.

Entre las causas que ingresan más, citó a los hechos punibles contra el honor y la reputación como ser la difamación, calumnia e injuria. Con respecto a las causas que con menor cantidad, mencionó a las de lesión culposa, daño.

Contabilizó 300 causas, entre audiencias de conciliación y juicio oral tienen una cantidad mensual de 50 causas, pero no todas se desarrollan debido los acuerdos y otras cuestiones alternativas que se van dando.

Cuando se le preguntó sobre sus hijos, manifestó que el momento más hermoso que comparte con ellos cuando llega a la casa y le cuentan sobre su día.

En el tiempo con sus hijos, mencionó que juega a los videojuegos, el ajedrez y con su hija lo hace con la Barbie y Kent.

 Sus inicios en el Poder Judicial fue como practicante en el año 2005 en el juzgado Civil con la jueza Beatriz Velázquez, luego cuando fue nombrado en el 2006 le trasladaron al juzgado de la jueza Olga Talavera como dactilógrafo, en el 2008 ascendió como notificador en el área penal y meses después como actuario judicial con una de las mejores juezas penales que conoce la Doctora Mesalina Fernández Franco y tiene 17 años como funcionario de la Corte Suprema de Justicia.